El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) avala la prohibición del sacrificio animal según los ritos musulmán y judío

El Tribunal Europeo de Derechos Humanos cree que el aturdimiento eléctrico no letal es una medida “proporcionada” que “respeta el contenido esencial” del derecho a la libertad de culto.

13 febrero 2024

La alianza que habían tejido los musulmanes y los judíos de Bélgica para que la UE permitiera el sacrificio de los animales sin aturdimiento previo -siguiendo los preceptos de los ritos halal y kosher, respectivamente-, perdió ayer su última batalla. El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) ve justificada la restricción de la libertad religiosa que supone la prohibición si la medida es “proporcionada” y busca la protección del bienestar animal. Por eso, descarta que comporte una vulneración del derecho a la libertad de culto ni una discriminación hacia los musulmanes y los judíos, tal y como estos pretendían.

La polémica viene de lejos y, mientras las asociaciones animalistas hace tiempo que luchan por frenar los sacrificios con los rituales halal o kosher, las comunidades musulmanas y judías reivindican su libertad de culto. Las leyes de los distintos países de la UE establecen la obligatoriedad del aturdimiento previo al sacrificio, por lo que, para salvar las excepciones halal y kosher, los gobiernos otorgaban permisos especiales -con la oposición de los animalistas- a estas comunidades. En el 2020, el TJUE respaldó que se retiraran los permisos especiales de los que gozaban musulmanes y judíos.


En el 2020, el TJUE respaldó que se retiraran los permisos especiales de los que gozaban musulmanes y judíos.

Con el aumento de la presión de los defensores de los animales y el reconocimiento dentro de la UE del fomento del bienestar animal como un objetivo de interés general, muchos de estos permisos se fueron revocando. En el 2020, el Tribunal de Justicia de la UE avaló que se retiraran estas excepciones, cosa que Bélgica ya había hecho en enero del 2019, hecho que los judíos belgas consideraron como el mayor asalto a la comunidad judía desde la ocupación nazi.

Agotada la vía interna, las comunidades musulmanas y judías de Bélgica elevaron el caso en última instancia al TEDH. Frente a Estrasburgo, alegan que la norma está impidiendo a los judíos y los musulmanes obtener carne de acuerdo con los preceptos de su religión. Según ellos, la prohibición es una “injerencia injustificada” en su derecho a la libertad de culto y, además, supone una discriminación por motivos religiosos.

El reglamento europeo establece que hay que evitar que “el sacrificio pueda provocar dolor, angustia, miedo u otras formas de sufrimiento a los animales, incluso en las mejores condiciones técnicas disponibles”. Pese a admitir que se trata de una injerencia en la libertad de culto, el TJUE consideró que se puede prohibir la matanza por los rituales halal y kosher siempre que la medida sea proporcional y responda a un objetivo de interés general reconocido en la UE, como es el fomento del bienestar animal. Así, el tribunal con sede en Luxemburgo cree que el aturdimiento eléctrico no letal es una medida “proporcionada” que “respeta el contenido esencial” del derecho a la libertad de culto que recoge la Carta de Derechos Fundamentales de la UE.

En España los sacrificios siguiendo los rituales halal y kosher están permitidos, mientras que en otros países están prohibidos hace tiempo.

El ritual de sacrificio musulmán implica un corte seco en el cuello del animal mirando hacia La Meca mientras se invoca a Alá y se espera que se desangre por completo lo más rápido posible. El judío, con algunas variaciones, también implica un corte profundo y uniforme en la garganta con un cuchillo afilado. En ambos métodos, uno de los requisitos (que comparten ambas religiones) es el de que el animal esté en perfecto estado de salud antes del sacrificio.

En España, ambos métodos de sacrificio están permitidos, pero hay otros países -Suecia, Dinamarca, Eslovenia, Islandia y Noruega- donde están prohibidos, mientras que Finlandia va más allá y exige que el animal esté sedado.

Fuentes de información:

Cataluña tiene tantos cerdos como habitantes

En medio de la sequía, los cerdos consumen 31 millones de litros de agua al día. 

4 enero 2024

El Departament d’Acció Climàtica, Alimentació i Agenda Rural de Catalunya presentó hace una semana su informe anual sobre el sector porcino correspondiente al año 2022, y los datos revelaron una realidad que muchos desconocen: en Catalunya hay tantos cerdos (7.948.717 cerdos) como ciudadanos (recientemente se alcanzaron los 8 millones, según el Idescat).

Este dato sería solo una anécdota si no fuera por la cantidad de agua que consumen estos animales y por la emergencia climática que sufre Catalunya. Según datos Greenpeace, el 99% de la cría porcina en Catalunya es industrial, es decir, en macrogrannjas. Esta «inmensa producción ganadera industrial» tiene «graves consecuencias ambientales», advierte esta organizaciones internacional.

Según el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico y recoge el periódico digital La Política, un cerdo de macrogranja en la fase de cebo consume de 2,2 a 2,8 litros de agua por kg de materia seca ingerida (entre 2 y 2,25 kg/día). Contando que cada animal consume cuatro litros al día, y multiplicándolo esta cantidad por el censo porcino (7,9 millones), se descubre que los cerdos consumen 31 millones de litros diarios.  

Además, las macrogranjas suelen general una canitad de extrementos superior a la que se puede absorver el suelo agrícola, por lo que se acaban contaminando los nitratos de los suelos y también las aguas subterràneas. 

«Es inadmisible e indignante que en Catalunya pese a que la contaminación del agua por nitratos siga en aumento, se continúe a la vez permitiendo el crecimiento de la cabaña ganadera», afirman desde GreenPeace a La Política. 

Además, alertan que «Catalunya es la comunidad autónoma que más contribuye al cambio climático debido a su modelo de ganadería industrial, deberían ser más que suficientes para pasar a la acción de forma inmediata y urgente».

Fuente de informació: Catalunyapress

Leer noticia: https://www.catalunyapress.es/articulo/sociedad/2024-01-04/4670079-catalunya-tiene-tantos-cerdos-como-habitantes?utm_campaign=webpush&utm_source=webpush&utm_medium=webpush&socid=1042954

En plena sequia Cataluña busca agua en sus acuíferos pero el «40% están contaminados».

El elevado nivel de nitratos debido a los purines de las granjas de cerdos y a los fertilizantes agrícolas compromete unas aguas subterráneas que son “reservas estratégicas”

12 diciembre 2023

Inmersa en la peor sequía de su historia, Catalunya sigue dando pasos para ahorrar agua como sea. A la próxima declaración de emergencia en toda la zona de Barcelona y Girona se le han sumado recientemente las primeras multas a pueblos que incumplen los consumos máximos decretados, el anuncio de replantear el canon del agua para penalizar los derroches o la petición de cerrar las duchas en algunas instalaciones deportivas.

Con los embalses cada vez más vacíos y las desaladoras funcionando ya al 100%, una de las principales alternativas está bajo tierra. Son los acuíferos o aguas subterráneas, con muchísima más capacidad de almacenamiento que los embalses. Este miércoles la Agencia Catalana del Agua (ACA) ha abierto una convocatoria de subvenciones de hasta 10 millones de euros para que los ayuntamientos recuperen o construyan nuevos pozos. El problema es que muchos de ellos están en mal estado químico principalmente debido a un exceso de nitratos causado por los purines de las granjas de cerdos y por los fertilizantes agrícolas. 

“La contaminación de los acuíferos por nitratos viene de muy lejos, hace décadas que tenemos este problema que viene de las granjas”, reconoce el alcalde de Saus, Camallera y Llampaies. Su municipio está en la comarca del Alt Empordà, que tiene 389.431 cabezas de ganado porcino. Pero en otras comarcas, como Osona, esta cifra supera el millón. Y se nota en las aguas subterráneas. Allí hay fuentes que sacan agua con unos niveles de nitratos que multiplican por diez los recomendados. “Lo llaman zonas vulnerables a la contaminación, pero realmente son zonas ya vulneradas”, opina Ginesta Mary, presidenta de la asociación ecologista Grup de Defensa del Ter (GDT). 

De las 37 masas de agua subterránea que hay en Catalunya, 17 presentan un mal estado químico por nitratos, un 46%. Esto significa que se detecta en ellas valores superiores a 50 mg/litro. Además, según los datos de la Agència Catalana de l’Aigua, un total de 466 municipios, el 49% del total, están en zonas consideradas como vulnerables a estos excesos.

Fuente de información: elDiario.es

Leer noticia: https://www.eldiario.es/catalunya/catalunya-busca-agua-acuiferos-plena-sequia-historica-40-contaminados_1_10758965.html

La «granja del terror»

1 diciembre 2023

Una macrogranja de cerdos situada en el municipio de Quintanilla del Coco (Burgos) y que había sido reconocida con sellos de bienestar animal encierra, en realidad, «uno de los peores casos de maltrato animal jamás descritos en España». Según desvela una investigación del Observatorio de Bienestar Animal (OBA), en estas instalaciones hay cientos de animales en malas condiciones, con graves heridas, deformidades y en espacios rodeados de gusanos. En las grabaciones incluso se pueden ver lechones agonizando a la vera de animales muertos, en estado de descomposición y hasta desmembrados. Los responsables de la granja ya han sido denunciados ante los juzgados de Lerma por presuntos delitos de maltrato animal y la empresa que gestiona la distribución de los productos cárnicos por publicidad engañosa. El tribunal ya está investigando el caso.

Fuente de información: El Periódico

Leer noticia: https://www.elperiodico.com/es/medio-ambiente/20231130/granja-terror-cerdos-burgos-observatorio-bienestar-animal-95164036

ONG ADDA en el IV encuentro estatal de “STOP GANADERÍA INDUSTRIAL”

31 marzo 2023

El pasado 25 y 26 de marzo se celebró en Balsa de Ves, municipio situado en la comarca de la Manchuela (Albacete), el Cuarto encuentro estatal de la Coordinadora Stop Ganadería Industrial, formada por más de 70 plataformas vecinales de España y por 6 entidades, entre ellas Ong ADDA.

En el encuentro, al que asistió Ong ADDA, se marcaron las futuras directrices de trabajo, se eligieron a los nuevos cargos representativos, y se planificaron las próximas movilizaciones. Coincidiendo en un año marcado por elecciones municipales y estatales, se estimó oportuno, aprovecharlo para exigir a todas las candidaturas, su posicionamiento referente a la poderosa industria cárnica.

También tuvo lugar una conferencia sobre la escasez y la contaminación de los recursos hídricos, cada vez más afectados por la ganadería industrial intensiva, consecuencia de los purines por su contenido en: nitratos, microbios fecales, bacterias resistentes a los antibióticos, entre otros, que se derivan de las macrogranjas. En España un 23% de los acuíferos están ya contaminados, una cifra que en Catalunya es del 40%.

Para finalizar el encuentro más de 200 personas iniciaron una marcha hacia el Complejo industrial del Grupo Sanchiz, donde se encuentra una explotación de cerdos, una planta de biogás y una incineradora. La concentración denunció los graves daños que este modelo de ganadería conlleva al medio ambiente, a la salud humana y el menosprecio con el que son tratados los animales.

Stop Ganadería Industrial, se fundó en el 2017, y tiene como objetivo principal luchar contra este modelo de macroinstalaciones y presionar para ejercer un cambio hacia una ganadería extensiva y familiar, respetuosa con el medioambiente y los animales.

EL ANIMAL MÁQUINA Performance de Ong ADDA: Stop Ganadería Industrial

21 febrero 2023

En el marco de la Semana de Lucha contra la Ganadería Industrial organizada por la Coordinadora Estatal Stop Ganadería Industrial Ong ADDA produce, y presenta el “El Show del Animal Máquina”, primer fragmento satírico, en donde un joven cerdo, durante sus seis meses de vida, debe cumplir con el objetivo de convertirse en el “superanimal” de la macrofábrica productora de carne.

¿Será el protagonista “Porqui” capaz de subsistir en 2 metros cuadrados? ¿Tendrá la capacidad, junto a sus desafortunados compañeros, de producir suficientes excrementos para ser vertidos y así lograr contaminar en pocos meses suelo, aire y agua? ¿Qué peligrosas consecuencias comportará este sistema productivo para las poblaciones vecinas?

La Ganadería Industrial, prototipo surgido a mediados del pasado siglo XX ha basado sus objetivos en la transformación del animal como una máquina productora para lograr, con el menor coste, el máximo rendimiento y beneficio económico. En contraste con la ganadería en extensivo o el pastoreo, estas macro fábricas intensivas implican graves daños constatados en forma de contaminación del agua por nitratos, propagación atmosférica de óxidos nitrosos y amoníaco, y emisiones de gases de efecto invernadero.

 Todo ello unido a la proliferación de las bacterias resistentes a los antibióticos, a la contribución a la tala de bosques tropicales debido a la importación de soja que consumen, la dudosa calidad de esta carne estresada más proclive a contener sustancias poco saludables, y el maltrato inherente que conlleva para los que más lo sufren, los que no pueden quejarse, como son los millones de animales indefensos.

En España, a pesar de las recomendaciones,  las advertencias de los científicos y la acción continuada de las organizaciones no gubernamentales, el modelo iniciado en Cataluña a final de los 80, no solo perdura, sino que continúa expandiéndose.

En 2022 se incrementaron en 138 las grandes explotaciones industriales de porcino, capaces de concentrar hasta 6.000 animales para engorde y 750 madres de reproducción. El estado español es, ahora mismo, el tercer país del mundo en el negocio de criar y matar cerdos sobrepasando los umbrales permitidos de amoníaco, aumentando las aguas contaminadas hasta el 23%, e influyendo en la despoblación del medio rural.  

Ver video: EL ANIMAL MÁQUINA

Más Información:

 

Pollos cruelmente maltratados en Italia

Recientemente, el servicio de radiodifusión pública italiano (RAI) emitió un episodio de su programa de investigación “Report” dedicado a la producción avícola “Che polli!” . La periodista Giulia Innocenzi describió una serie de cuestiones críticas sobre la empresa líder en producción avícola orgánica en Italia.

27 enero 2023

Italia: Pollos ‘orgánicos’ cruelmente maltratados. La investigación, una vez más, arroja luz sobre algunos problemas graves en el sistema de cría de pollos que produce miles de millones de animales al año. Con la revisión actual de la legislación de la UE sobre bienestar animal, esto podría y debería detenerse.

Alrededor del 98% de los pollos criados en Italia por su carne son razas de pollos de engorde, que han sido específicamente seleccionados y modificados genéticamente para crecer en proporciones enormes en un tiempo récord. La idea es producir las partes de su cuerpo más demandadas en el mercado.

Genéticamente seleccionados

Los pollos de engorde desarrollan pechugas enormes en cuestión de semanas. Estas son tan grandes que los animales no tienen la fuerza necesaria para sostenerse sobre sus patas. Pero, son un lucrativo negocio porque se envían al matadero con apenas cuatro semanas de edad.

La selección de rasgos que proporciona un crecimiento rápido y el desarrollo de partes específicas del cuerpo solo es posible mediante una selección genética no regulada. Además, los pollos de engorde sufren enfermedades cardiorrespiratorias y musculo-esqueléticas como resultado de que sus cuerpos muy deformados superan lo que sus músculos y corazones pueden soportar.

La agonía y el maltrato animal de dichos pollos es tangible, como se evidencia una vez más en la investigación del Informe. Además, algunos son asesinados por trabajadores no calificados, mientras aún están en el establo entre otros animales y no en el matadero. ¿La razón? No están creciendo lo suficientemente rápido. Esta práctica no es legal, pero es una realidad para en la enorme mayoría de los sistemas intensivos de granjas avícolas.

Seguir leyendo noticia aquí

Fuente de información: Ecoticias.com

Las macrogranjas de cerdos en España aumentan un 6% en un año

Una vez pasada la tormenta que envolvió la producción intensiva de porcino al inicio de 2022, las grandes explotaciones han continuado, con sus problemas asociados de contaminación del agua y el aire.

14 enero 2023

Lejos de calmarse, la fiebre por las macrogranjas que ha convertido a España en la fábrica porcina de Europa se ha incrementado. Las grandes explotaciones de cerdos no paran de extenderse –y con ellas los problemas ambientales que llevan asociados–. En 12 meses, las granjas intensivas de porcino de mayor tamaño crecieron un 6%. Hay 138 granjas más de tipo III, según los datos del Ministerio de Agricultura. Arde un árbol en la Amazonía para que coma un cerdo de macrogranja en EspañaMÁS

Una vez amainada toda la tormenta que las envolvió al inicio de 2022, trimestre a trimestre, la macrogranjas han ido aumentando. Si en octubre de 2021 había 2.193 de estas explotaciones de gran tamaño, en marzo del año pasado ya eran 2.214, en junio 2.287 y en octubre de 2022, habían alcanzado las 2.331. Un salto del 6% –el promedio de crecimiento de la década es de un 4%–.

Cada una de estas macrogranjas puede contener más de 5.000 cerdos engordando antes del sacrificio y otras 750 hembras reproductoras, según la equivalencia de unidades ganaderas mayores (UGM) que hace el Observatorio Dehesa del Centro de investigaciones científicas y tecnológicas de la Junta de Extremadura. La legislación permite, además, que las comunidades autónomas suban esa capacidad un 20%. Es decir, más de 1.000 cerdos extra en la explotación.

En España cada vez hay más cerdos, pero criados en menos granjas. Las explotaciones pequeñas y reducidas han caído un 22% en la última década. Solo aumentan las de mayor capacidad de producción

A este volumen hay que añadirle las explotaciones de tipo II que pueden llegar albergar hasta 2.000 cerdos (más 200 hembras) y que también han pasado de 9.945 a 10.027 en 12 meses. No todas estas llegan al máximo pero, en definitiva, hay más de 3.300 explotaciones de cerdos en España que gestionan 2.000 o más ejemplares.

En este contexto, el número de cerdos criados en España (la mayoría en régimen intensivo como el de las macroganjas) sigue al alza. A mayo de 2022 –el último dato disponible en Agricultura– el censo estaba en más de 32,5 millones de ejemplares. Había subido un 0,5% en un año, mientras en el resto de potencias porcinas europeas –Alemania, Francia, Polonia, Dinamarca o Países Bajos– descendían.

Así que el curso pasado ha seguido consolidando un modelo ganadero de porcino intensivo y concentrado. En España cada vez hay más cerdos, pero criados en menos granjas. Las explotaciones pequeñas y reducidas han caído un 22% en la última década. Solo aumentan las de mayor capacidad de producción.

El boom de la produccion porcina ha hecho que la carne de cerdo se haya convetido en el producto agroganadero más exportado por España. En 2021 se vendió a otros países por valor de 5.500 millones de euros, por delante de los cítricos y el aceite de oliva, según el Informe de comercio exterior agroalimentario del Ministerio de Agricultura.

Pero, en el otro lado de este nicho de mercado, la concentración de miles de cerdos en factorías perpetúa los daños ambientales al aire y al agua que impone esta fórmula.

Contaminación del agua y del aire

La proliferación de megaexplotaciones de miles de cerdos ha hecho que España incumpla sistemáticamente los límites de emisiones a la atmósfera de amoniaco que provoca la degradación del estiércol de los animales.

España siempre ha rebasado los umbrales de amoniaco trazados al amparo de la normativa europea. Entre 2010 y 2019, el tope estaba colocado en las 373 kilotoneladas. Jamás se cumplió. A partir de 2020 entró en vigor una revisión legal cuyo nuevo techo era mucho más permisivo pero, de momento, también se ha fallado.

Hasta 2029 bastará con que las emisiones de amoniaco (la mayoría provienen del ganado porcino) estén un 3% por debajo de los 482 kt registradas en 2005. Pero en 2020 se contabilizaron 483 kt; es decir, más que en 2005, no menos. Los últimos datos, que serán de 2021, están por llegar.

El problema no es un secreto. En 2020 el Gobierno lanzó un decreto sobre granjas intensivas porcinas que decía: “La producción porcina puede tener un significativo impacto, especialmente en relación con la producción de nitratos y las emisiones de amoniaco a la atmósfera”.

El texto establece medidas para que las explotaciones rebajen estas emisiones, aunque para las granjas que ya existían entonces entrarán en vigor a partir de enero de este año.

Además del aire, como recogía el decreto, la cría intensiva de miles de cerdos suponen un peligro para las aguas. Los cada vez más célebres purines (los desechos de los animales mezclados con agua) pueden contaminar con nitratos los cursos y los acuíferos. Un problema sistémico en España, según ha analizado la Comisión Europea, que ha llevado al Estado al Tribunal de Justicia Europeo por incumplir la ley en materia de calidad de aguas.

Macrogranjas y deforestación

El 6 de diciembre pasado, la Unión Europea acordaba una ley contra la degradación forestal que provoca el consumo europeo. A pesar de sus lagunas, incide de lleno en un eslabón de la cadena productiva en la que se insertan las macrogranjas de cerdos españolas: la importación de soja para los piensos con los que se alimentan los animales.

Las habas de soja “son la base proteica de la alimentación ganadera”, describe Agricultura. Y debido a que apenas se produce en España “se trata de un producto necesariamente importado”. España gastó 1.700 millones de euros en comprar habas de soja en 2021. Un 49% más que el año anterior, según el informe anual de comercio exterior agroalimentario y pesquero del Ministerio.

Y el 67% del valor total importado de haba de soja procede de Brasil. Allí, el cultivo masivo e intensivo de soja ha estado detrás de la destrucción de miles de hectáreas de bosque de la Amazonia y El Cerrado. Los cerdos cuya carne exporta España comen la soja (el pienso) que crece en Brasil a costa de deforestar la selva.

Esta factura indirecta es la que intenta acotar la nueva normativa europea. Sin embargo, las macrogranjas siguen multiplicándose.

Leer noticia aquí

Fuente de información: elDiario.es

Debate en la Unión Europea por el bienestar animal

La reunión comenzó con un discurso conmovedor de la comisaria Stella Kyrikades, quien afirmó que la UE «necesita hacer más» para mejorar el bienestar animal, especialmente porque la legislación sobre bienestar animal no ha sido revisada desde 2009.

20 diciembre 2022

Debate en UE por bienestar animal. En la última reunión del Consejo de Agricultura y Pesca de la CE hubo un interesante debate sobre el bienestar animal. El mismo reveló que muchos países tienen sumo interés en buscar vías mediante las cuales mejorar la legislación en áreas como el bienestar de los animales de granja, incluidos los peces. Y en cómo estos valores pueden reflejarse en las políticas comerciales.

Los miembros de Eurogroup for Animals estaban complacidos de escuchar a Sylvia Kyrikades mencionar la respuesta positiva de la Comisión a la ECI ‘End the Cage Age’. La Comisaria señaló la necesidad de una transición a la cría sin jaulas. También abordó temas específicos por los que han estado haciendo campaña las organizaciones ambientalisatas, incluido el bienestar de los peces de cultivo y las vacas lecheras.

Además, Kyrikades destacó que las regulaciones actuales para el bienestar animal son demasiado vagas. Y no se aplican adecuadamente, particularmente en lo que respecta al sacrificio y el transporte. La UE no tiene suficiente supervisión de estos procesos para garantizar que se cumplan buenos estándares de bienestar animal. Y de manera similar, se deben considerar los problemas relacionados con el comercio, tanto dentro como fuera de la UE.

Concluyó diciendo que un enfoque armonizado del bienestar animal en el ámbito de la UE beneficiaría a los animales y a las personas. Además de fortalecer nuestros sistemas alimentarios y los de la salud pública.

Seguir leyendo la noticia aquí

Fuente de información: Ecoticias.com

Una quincena de empresas cárnicas y lácteas emiten más metano que países como Alemania y Canadá

Gigantes del sector ganadero, entre los que se encuentran Nestlé, Danone y JBS, equivalen a más del 80% de la huella total de metano de la Unión Europea y superan con creces la de varios países. Un nuevo informe del Instituto de Política Agrícola y Comercial y Changing Markets calcula su responsabilidad e insta a los gobiernos a apoyar una transformación agrícola justa.

25 noviembre 2022

No son pocas las veces que hemos oído decir que somos lo que comemos. Porque la comida es vida. Y, por ello, debemos darle la importancia que se merece. Pero, si se trata de las industrias cárnica y láctea, lo importante no es la carne y la leche, sino lo que está oculto tras su producción: nos comemos su contaminación.

Y es que cada granja, cada instalación ganadera, conforma una huella de metano (uno de los principales gases que calienta el planeta) demasiado grande para el riesgo climático al que nos enfrentamos. De hecho, si se juntaran 15 grandes empresas de este sector, entre las que se encuentras marcas muy conocidas como Nestlé y Danone, emitirían más que un país entero. El Instituto de Política Agrícola y Comercial (IATP, por sus siglas en inglés) y la fundación Changing Markets calculan exactamente cuánto en un nuevo informe.

Unidas, todas ellas son responsables del 3,4% de las emisiones mundiales de metano procedentes de la actividad humana y equivalen a más del 80% de la huella total de metano de la Unión Europea. Son casi 13 toneladas, mucho más de lo que emite Alemania, y más gases de efecto invernadero que gigantes de su industria hermana, la de los combustibles fósiles, como ExxonMobil, BP y Shell.

Por separado, encontramos a nombres reconocibles, como la empresa cárnica brasileña JBS, clave en la deforestación de la Amazonia, que supera las emisiones de metano ganaderas de Francia, Alemania, Canadá y Nueva Zelanda unidas, lo que se traduce al 55% del metano producido por todo el ganado de Estados Unidos. O a la multinacional estadounidense Tyson Foods, cuyas emisiones son comparables a las del sector ganadero ruso entero.

«Las emisiones de metano de las grandes empresas cárnicas y lácteas rivalizan con las de los Estados y, sin embargo, ocultan su colosal huella climática tras un barniz de greenwashing y objetivos de cero emisiones. Estas empresas no harán lo que es necesario de forma voluntaria: los Gobiernos deben establecer normas para regular sus emisiones y apoyar a los agricultores para que abandonen la agricultura industrial«, defiende Shefali Sharma, directora de IATP Europe.

Fuente de información: climatica.lamarea.com

Seguir leyendo aquí