Explotación «animal» en las explotaciones lecheras.

26 Junio 2020

El bienestar animal no es una cuestión menor. Bruselas lleva tiempo incidiendo en un asunto que no puede pasar desapercibido para los ganaderos. De hecho, a finales del año pasado la UE instó ya a establecer normas específicas de bienestar animal para los terneros de menos de seis meses. El mensaje era para todos los ganaderos, pero en especial para los que manejan terneros frisones de recría. Porque aunque se ha avanzado mucho en el tema, en el caso de los animales que nacen en explotaciones lácteas todavía queda un largo camino por recorrer. El trato que reciben los terneros que llegan desde las granjas lácteas a los mercados no es homogéneo. Algunos acaban muriendo en el camino a los cebaderos, lo que supone un perjuicio para todos porque acaba devaluando su valor, como ya denunciaron en su día colectivos de tratantes como Astragal o Acega. Esta semana, por ejemplo, en Santiago hubo animales por los que no se pagaron más de 15 euros.

La cuestión no es baladí, ya que las 7.000 explotaciones lecheras que permanecen en activo en Galicia generan entre 1.500 y 2.000 animales de recría cada semana que acaban en los mercados de Silleda, Amio y Castro Riberas de Lea para luego ser redirigidos a cebaderos de Galicia y del resto de España.

Todo este grave problema es como una pescadilla que se muerde la cola. Hay ganaderos, como han reconocido desde el sector repetidas veces, que tratan de deshacerse de los terneros cuanto antes debido a que no les es rentable mantenerlos por el escaso precio que alcanzan. Pero la baja cotización derivada de la elevada mortalidad de unos terneros que compiten con otros llegados de otros países de Europa con mejores condiciones.

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Fuente de información: La Voz de Galicia

El Parlament Balear aprueba posibilitar que se instalen cámaras de vigilancia en los mataderos

18 junio 2020

La Comisión de Economía del Parlament ha aprobado este miércoles una Proposición No de Ley (PNL) para iniciar, entre las consellerias responsables, las tramitaciones para posibilitar la instalación de un sistema de circuitos cerrados de televisión (CCTV) en los mataderos de Palma, Inca, Felanitx, Manacor, Ciutadella, Maó, Ibiza y Formentera.

La iniciativa ha sido presentada, en coordinación con la ONG Equalia, por el Grupo Parlamentario Socialista y Unidas Podemos y defendida por los diputados Alejandro López y Helena Benlloch.

Según ha explicado el portavoz del Grupo Parlamentario Unidas Podemos, Alejandro López, «el objetivo es asegurar el cumplimiento de las normativas de seguridad alimentaria, de protección animal en los procesos de la cadena de sacrificio y el control de los servicios veterinarios oficiales».

«El motivo es muy claro», ha apuntado López, quien ha señalado que no es otro que «tranquilizar al consumidor y dejar claro que en Baleares no solo se cumple con las normas, sino que además se está comprometido como en el resto de países europeos con la protección animal, evitando así sufrimiento innecesario».

La iniciativa también pide que se presente y se elabore en el Parlament un informe sobre los costes que supondría hacer esta instalación progresiva dentro de esta legislatura en todos los mataderos activos de Baleares, y que se cubran en su totalidad con fondos de la Comunidad Autónoma y los ayuntamientos de los municipios donde estén situados los mataderos.

Por otra parte, se pide garantizar que las imágenes almacenadas por el sistema de circuito cerrado de televisión (CCTV), se almacenen durante el máximo de tiempo que permite la Ley Orgánica de Protección de Datos, para facilitar el trabajo a los inspectores y veterinarios.

«Aunque la gran mayoría consumimos carne, ninguno queremos que los animales sacrificados padezcan un sufrimiento innecesario, y herramientas como estas, siempre dan más garantías y seguridad a la población al respecto», ha resaltado López.

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Fuente de información: La Vanguardia

Más información:

20minutos

Noticias Mallorca.es

Diario Veterinario

Nou Diaro.es -Eivissa i Formentera

Fábricas de carne: la crueldad de la industria de la carne de pollo en España

17 junio 2020

Igualdad Animal presenta junto a ‘Público’ ‘Fábricas de Carne’ un reportaje que documenta la crueldad del crecimiento rápido que sufren los pollos con la visita de Ana Pardo de Vera y Silvia Barquero a una granja durante las diferentes fases de desarrollo de los animales.

La organización internacional de protección de los animales expone junto a ‘Público’ el sufrimiento extremo que padecen estos pollos, que viven hacinados en un aire irrespirable y con el abdomen abrasado por la falta de limpieza. Muchos colapsan y mueren al no poder alcanzar los comederos. Hemos querido documentar el terrible sistema de cría al que son sometidos los pollos usados para producir carne.

El Gobierno de Aragón lo admite al fin: limitar las macrogranjas resulta beneficioso

El Gobierno de Aragón avala las normas urbanísticas con las que el Ayuntamiento de Sabiñánigo vetó la ganadería industrial para proteger la tradicional y evitar el efecto llamada que sigue llenando de cuadras el mundo rural pese al pinchazo de las exportaciones a China

8 de junio 2020

El Gobierno de Aragón ha acabado por admitir que limitar la ganadería industrial y las macrogranjas de porcino que llevan años expandiéndose por el territorio de la comunidad resulta beneficioso para el medio ambiente, tal y como vienen defendiendo las organizaciones ecologistas y el creciente número de ayuntamientos y plataformas locales que reclaman frenar la desmesurada expansión de este modelo productivo, que está devorando el tradicional de granjas familiares.

El pronunciamiento lo ha hecho el Inaga (Instituto Aragonés de Garantía Ambiental) en la resolución por la que exime de someter a una evaluación ambiental estratégica la decisión del Ayuntamiento de Sabiñánigo de prohibir «en todo el término municipal la implantación de nuevas pequeñas explotaciones, explotaciones industriales o instalaciones industriales de guarda de animales destinadas al ganado porcino».

La norma, materializada mediante una modificación del PGOU (Plan General de Ordenación Urbana) de 2006, sitúa en 360 unidades ganaderas el límite para las cuadras de cerdos, lo que equivale a 375 madres o 3.000 animales de cebo, al tiempo que veta su ubicación en cualquier terreno que forme parte de una Zepa (Zona Especial de Protección de Aves) o LIC (Lugar de Interés Comunitario) (hay tres y diez) o esté incluida en el Parque Natural de la Sierra de Guara. Tampoco podrán levantarse a menos de 1.500 metros del «límite del suelo urbano de los núcleos de población» del municipio, que son 52 habitados y otros 21 despoblados.

«Una razón imperiosa de interés general»

La resolución del Inaga, que lleva años autorizando casi a diario la apertura de nuevas granjas con un vertiginoso ritmo que ha convertido a la comunidad en la que soporta la mayor cabaña porcina del país, con las negativas consecuencias ambientales y de salud pública que ello está conllevando, ha concluido que la decisión del consistorio serrablés «favorece la conservación de espacios sensibles como la Red Natura 2000 y los ENP» (Espacios Naturales Protegidos) y también «la ganadería extensiva y las explotaciones locales, lo que es sostenible ambientalmente», además de que “no implica una alteración urbanística de la clasificación del suelo ni cambios de los usos del suelo”.

La obviedad no resta valor simbólico a las conclusiones del Inaga, ya que en la práctica se trata del órgano del que depende la apertura de nuevas granjas y la ampliación de las existentes en el territorio de la comunidad.

«Las medidas y el condicionado ambiental que incorpora el presente informe quedan justificadas y motivada su necesidad para la protección del medio ambiente, ya que dicha protección constituye una razón imperiosa de interés general», indica el documento.

«Evita la acumulación de grandes cantidades de estiércoles líquidos»

El Inaga concluye, negro sobre blanco, que el veto a la ganadería industrial «disminuye los requerimientos de recursos e infraestructuras que las grandes explotaciones necesitan» y, al mismo tiempo, «evita la acumulación de grandes cantidades de estiércoles líquidos que producen estas explotaciones y que generan elevadas emisiones a la atmósfera, malos olores y requieren muchas más tierras para su valorización como fertilizante con los consiguientes incrementos en los desplazamientos» de vehículos y, con ellos, del lanzamiento de gases de efecto invernadero.

Por último, el Instituto Aragonés de Garantía Ambiental señala que ese veto también resulta «positivo desde el punto de vista paisajístico», puesto que «evita la instalación de naves más numerosas o de mayor tamaño» por el territorio, lo que «reduce el impacto paisajístico de las mismas en el medio agroforestal».

El desmesurado desarrollo de la ganadería industrial del porcino ha situado a Aragón como el principal productor de este tipo de animales de abasto, cuya presencia alcanza magnitudes superiores incluso a las de Cataluña, que tradicionalmente había sido el territorio con mayor implantación: los datos del Ministerio de Agricultura indican que el porcino aragonés lleva dos años (2018 y 2019) superando los ocho millones de cabezas de manera constante, algo que ninguna otra había sufrido antes.

Esas cifras de récord llegan cuando, según los informes del Ministerio de Agricultura, comienzan a consolidarse los indicadores que apuntan a un pinchazo de la burbuja española del porcino, con desplomes de precio cercanos al 20% en menos de tres meses tras hundirse la demanda de China, que está optando por otros proveedores.

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Fuente de información: Eldiario.es

Encuentran miles de vacas en condiciones deplorables en un buque atracado en el Puerto de La Luz

Los agentes de Vigilancia Aduanera necesitaron equipos de respiración autónoma para acabar con la inspección

1 junio 2020

El pasado 27 de mayo Vigilancia Aduanera encontró 5000 vacas en condiciones dantescas e insalubres en el interior de un buque que llegó al Puerto de La Luz y Las Palmas. El hallazgo se produjo durante una operación de control, ya que se tenía la sospecha que el barco, el F.M.Spiridon con bandera de conveniencia de Togo, podría estar trasladando sustancias estupefacientes.

Sin embargo, y al acceder a este barco que se dirigía a Egipto, los agentes no pudieron continuar con su inspección debido al deplorable estado de los animales que encontraron en su bodega. Según se puede ver en las imágenes a las que ha tenido acceso la Cadena SER, estas 5000 vacas se encontraban hacinadas, en condiciones de extrema delgadez y sobre una capa de excrementos de varios centímetros. Debido a su mal estado, varias de ellas murieron antes de llegar a puerto y sus cadáveres fueron depositados en la misma cubierta a la intemperie.

Ante este dantesco escenario, los agentes de Aduanas precisaron de equipos de respiración autónoma que fueron proporcionados por el cuerpo de bomberos de Las Palmas de Gran Canaria, que también participó en la inspección así como la Policía Nacional.

Por el momento se desconocen más detalles de la operación y el buque ya ha zarpado hacia su puerto de destino.

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Fuente de información: Cadena Ser

Los ganaderos plantean sacrificar 1 de cada 5 lechones ibéricos por la caída de la demanda

Productores e industriales de ibérico de cebo y cebo de campo, que aglutinan casi 3 de los 3,6 millones de sacrificios anuales, temen un desplome ante el cierre de bares y el turismo cero.

11 abril 2020

El sector del cerdo ibérico teme un empacho de carne en el mercado una vez pase lo peor de la pandemia del coronavirus. Algo que podría hundir los precios y agravar el golpe que ya sufre este segmento emblemático de la ganadería española por la crisis sanitaria. Y ello porque, según el análisis realizado por Asici (Asociación Interprofesional del Cerdo Ibérico), el cierre de bares y restaurantes sumado el turismo cero se está produciendo en paralelo al sacrificio medio mensual de entre 250.000 y 300.000 guarros ibéricos de las categorías cebo (alimentados con pienso en granjas) y cebo de campo (pienso y hierba al aire libre, pero sin bellota). Ante ello plantean una solución inédita.

Se trata de sacrificar de antemano parte de los animales que se prevé que serán llevados a matadero en noviembre y diciembre. En palabras de Antonio Prieto, presidente de Asici, «ya que la Semana Santa y el inicio de las vacaciones serán momentos de nulo o muy bajo consumo, tenemos que prepararnos para que las fiestas navideñas no lleguen con un exceso de carne«. Los lechones que ahora tienen un mes o menos, dentro de ocho meses estarían listos para ser sacrificados. La propuesta realizada por Asici tras consultar a organizaciones que agrupa como Asaja, Coag, UPA, Iberaice o Cooperativas Agro-Alimentarias, es que hasta un 20% de esos lechones salgan ya de la cadena de producción mediante un acuerdo de todo el sector que cuente con apoyo económico de las administraciones.

Se busca con ello «ventilar el mercado y evitar que el ibérico se devalúe y llegue a venderse al mismo precio que la carne de pollo», ejemplifica Prieto poniendo un ejemplo extremo. De salir adelante, sería una acción coordinada que no se recuerda desde la década de los ochenta del pasado siglo. En la anterior crisis, en 2008, Prieto recuerda que también se barajó y ejecutó en algunos casos particulares un sacrificio anticipado de lechones. Pero no al nivel que ahora se plantea. «En ese momento seguía habiendo un cierto nivel de consumo, aunque bajara, y se negoció con grandes cadenas como Carrefour, Leclerc o Alcampo para tratar entre todos de dar salida al exceso de carne que se generó».

Junto a esta medida, que supondría también un menor coste a los ganaderos al criar menos animales, el segmento mayoritario del ibérico está preocupado más a corto plazo por esa caída de la demanda del sector horeca (hostelería, restauración y catering). Una opción es el retraso en los sacrificios uno o dos meses. «Pero eso tiene dos inconvenientes para los ganaderos e industriales. Primero, que tienes que aguantar al animal y alimentarlo más tiempo lo que supone un coste de circulante no previsto. Y, además, al llegar con más peso al sacrificio, los jamones y paletas salen más grandes y eso penaliza posteriormente su comercialización«, explica Prieto desde su domicilio en Fuenlabrada de los Montes (Badajoz), donde pasa el confinamiento.

La situación a corto plazo supone también riesgo de la llegada de los intermediarios especuladores. «Ya hay quien está viendo cómo a un precio de 20 euros la arroba no vende los cerdos, pero si lo baja a 15 euros sí. Entonces no se trata de que no haya mercado, sino de que lo hay si se cede a la especulación«. Por eso, Asici también propone evaluar conjuntamente la capacidad de almacenamiento en frío del sector para sacar temporalmente del mercado carne que vaya a no venderse, o bien se acabe comercializando a precios no rentables para los ganaderos.

En total, en España se sacrifican al año unos 3,6 millones de cerdos ibéricos, de los que este año han sido 733.000 los que se alimentan con bellota y se crían en dehesas, siendo el resto (casi tres millones) animales engordados con pienso, hierba y pasto en granjas o al aire libre. En Asici están agrupadas 17.000 explotaciones porcinas, nueve de cada diez de las existentes, así como el 90% de la industria transformadora y comercializadora. A diferencias de los animales de bellota, que van a matadero de noviembre a marzo, el resto se sacrifica regularmente durante todo el año.

El ibérico de bellota salva la montanera

Por ello, en el segmento de mayor valor del ibérico, el de los cochinos alimentados con bellotas y hierba en las dehesas, la crisis sanitaria ha llegado justo al final de la campaña de sacrificios. Ello le ha permitido salvar los muebles, aunque la declaración del estado de alarma el 14 de marzo ha provocado precisamente un mayor recurso de los productores de este tipo de carne a la congelación de la parte destinada a venderse fresca. Esto ha hecho que una parte importante de esa capacidad de conservación en frío esté copada para el resto del ibérico que sigue yendo a matadero mes a mes. «Hay que determinar entre todos cuánta capacidad de almacenamiento hay a día de hoy».

Los casi 733.000 sacrificios suponen la segunda mayor cifra de los últimos seis años. «Esta categoría este año, con lo que se nos ha venido encima, puede calificarse de una isla dentro del conjunto del ibérico«, resume Prieto. Del total de animales de bellota sacrificados, el 54% corresponden al precinto negro, es decir, animales 100% de raza ibérica; y el 46% al precinto rojo. De este último porcentaje, el 11% fueron animales con un 75% de raza ibérica; y el 35% restante, un 50% de raza ibérica. En Andalucía se han engordado 344.080 animales (47%), en Extremadura 263.828 (36%) y en Castilla y León 52.942 (7,2%). Si a ellas unimos Portugal con 58.951 animales (8%), tenemos las cuatro zonas principales de engorde de animales de montanera.

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Fuente de información: El Confidencial

Detener el maltrato animal evitará futuras pandemias. Aysha Akhtar

Aysha Akhtar, neuróloga y especialista en salud pública estadounidense, trabaja actualmente en la Oficina de Contraterrorismo y Amenazas Emergentes, sirviendo como teniente comandante en el Cuerpo de Salud Pública de Estados Unidos. Especialista en analizar qué impacto tiene en la salud humana el tratamiento que damos a los animales no humanos, e n el contexto actual de crisis sobre el coronavirus ha hecho una serie de declaraciones argumentando que “al criar animales angustiados y enfermos, nos dañamos a nosotros mismos”.

25 marzo 2020

Es casi surrealista echar un vistazo en estos días a la charla TEDx que la doctora Aysha Akhtar impartió en 2014, que ahora mismo puede llegar a parecernos curiosamente premonitoria respecto a la situación actual del coronavirus. En el vídeo, vemos a Akhtar hablando de enfermedades como el ébola o el SARS, relacionándolas con la industria de explotación animal, al tiempo que ofrece sugerencias sobre cómo prevenirlas, llamando a cambiar nuestra relación con los otros animales.

Aysha Akhtar, autora del libro Animals and Public Health —Why treating animals better is critical to human welfare (Palgrave, 2012), cuyo título podemos traducir como “Animales y Salud Pública. Por qué tratar mejor a los animales es crítico para el bienestar humano”, persigue desde hace años demostrar el beneficio mutuo ­—para los humanos y el resto de los animales­­— que conlleva cuidar y proteger a todos los animales.

Akhtar es neuróloga y especialista en salud pública, y trabaja actualmente en la Oficina de Contraterrorismo y Amenazas Emergentes de la FDA (Administración de Alimentos y Fármacos) de Estados Unidos, sirviendo como teniente comandante en el Cuerpo de Salud Pública de Estados Unidos. La doctora colabora también con el Oxford Centre for Animal Ethics y es especialista en analizar qué impacto tiene en la salud humana el tratamiento que damos a los animales no humanos. 

En su libro, Akhtar explica cómo algunas de las amenazas para la salud pública más apremiantes están relacionadas con el trato que damos a los otros animales, y al hilo de la actualidad sobre el coronavirus se ha pronunciado ante algunos medios de comunicación, argumentando que “al criar animales angustiados y enfermos, nos dañamos a nosotros mismos”.

La doctora Akhtar afirma que “las tres cuartas partes de las enfermedades infecciosas humanas emergentes proceden de los animales. Pero esto no es culpa de los animales. Si queremos prevenir estas enfermedades y salvar a millones de personas de sufrimientos indecibles, tenemos que enfrentar una verdad inevitable e incómoda: el verdadero culpable es cómo elegimos relacionarnos y tratar al resto de animales”.

Akhtar aclara: “Aunque es demasiado tarde para prevenir la pandemia actual, quizá podamos prevenir otra si nos tomamos un momento para ver cómo la mayoría de las nuevas enfermedades infecciosas llegan a nuestra puerta”.

La neuróloga insiste en que “existe un vínculo directo entre el bienestar humano y el bienestar animal: del mismo modo que los humanos tenemos más probabilidades cuando estamos estresados, debilitados o heridos, estos mismos factores también suprimen el sistema inmune en los animales, dejándolos extremadamente vulnerables. Como resultado, el comercio mundial de animales crea animales muy enfermos, así como las condiciones ideales para que los patógenos se multipliquen y salten de un animal a otro, llegando finalmente a los humanos”.

“Para prevenir la próxima pandemia”, continúa, “debemos mirar más allá de los mercados de aves o el comercio ilegal en China. Todo el comercio mundial de animales debe parar. A un virus no le importa si se transmite a través de comercio ilegal o legal. El comercio de vidas salvajes en su conjunto es perjudicial para los ecosistemas, cruel con los animales y presenta un fuerte riesgo de aparición de nuevos virus. Necesitamos analizar detenidamente cómo nos relacionamos con todos los animales. Ahora es el momento óptimo para llevar a cabo un replanteamiento fundamental en este sentido”, concluye la especialista Aysha Akhtar.

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Fuente de información: Elsaltodiario.com

La contaminación atmosférica por los purines se duplica en seis años

Cataluña cuenta con una cabaña de nueve millones de cerdos, concentrados en las comarcas de Osona y Lleida.

29 febrero 2020

Mucho se ha dicho, medido y alertado de la contaminación de los acuíferos por purines que sufren las zonas de Cataluña que concentran las granjas porcinas. Pero no es tan conocida la contaminación que esta mezcla de orín con excrementos causa en la atmósfera, debido a la eliminación del nitrógeno en forma de amoníaco, principalmente a través de los orines. En seis años, la contaminación atmosférica por las emisiones de los purines se ha duplicado (han pasado de 9.500 toneladas en 2012, a 21.000 en 2018, según el registro oficial de contaminantes PRTR). Un dato alarmante, y más cuando el resto de emisiones se reducen.

En contacto con el aire —y más allá del olor que desprenden los purines—, el amoníaco favorece la generación de partículas contaminantes que impactan en la salud de las personas que las respiran, como ocurre con las emisiones de NO2. España incumple desde hace ocho años los umbrales máximos de emisiones atmosféricas de amoníaco y es el único país en el que las emisiones no se han reducido desde 1990. En 2018, recuerda el portal divulgativo Contaminació.Barcelona, que ha recopilado todos estos datos, la revista Naturepublicó una imagen de satélite donde se aprecia cómo Cataluña es la principal fuente de estas emisiones.

Actualmente, en la comunidad hay nueve millones de cerdos, cuyas granjas se concentran en la comarca de Osona y en Lleida. Lo recordaba esta semana la organización ecologista Depana, que publicó el manifiesto Ni un cerdo más, donde pide “medidas drásticas y urgentes” para reducir la contaminación que producen.

La directora general de Calidad Ambiental de la Generalitat, Mercè Rius, recuerda que el Govern ya no autoriza nuevas granjas “en zonas consideradas vulnerables”. Y que en 2019 aprobó un decreto sobre gestión de la fertilización del suelo que limita otra fuente de emisiones de amoníaco, que es el esparcir en abanico, con grandes cubas, purines como fertilizante en campos de cultivo. Rius admite, con todo, que esta contaminación es un problema, como lo muestra que “las partículas más pequeñas se han reducido en zonas urbanas y, en cambio, en las rurales aumentan o se mantienen”.

El investigador del CSIC Xavier Querol señala que el problema de las emisiones de amoníaco por purines “es de alcance europeo y afecta a un sector que ha evolucionado muy poco, mientras la industria se ha puesto las pilas”. El experto sitúa como grandes focos de emisiones las grandes instalaciones ganaderas, que con la peste porcina en China aumentaron su producción, y la citada aplicación de purines como fertilizantes. En el caso de las granjas, reducir las emisiones pasa por ventilarlas, no acumular purines y cuidar la alimentación de los cerdos, para reducir la cantidad de excrementos. Querol alude también a estudios recientes que han demostrado el impacto que las partículas tienen en la vegetación a partir de tres miligramos por metro cúbico: “En Osona se registran picos de más de 30 miligramos”, avisa.

Desde Unió de Pagesos, el responsable del sector porcino, Rossend Saltiveri, coincide en que “es necesario actuar” contra la contaminación que provoca el sector, y en el caso concreto de las emisiones de amoníaco, recuerda la entrada en vigor del decreto de fertilización, y que si algún ganadero no es capaz de gestionar los purines que genera su granja debe reducir su cabaña. Sobre los cambios en la alimentación, apunta que los ganaderos están introduciendo “alimentaciones más eficientes para que en los purines haya menos presencia de amoníaco”.

Saltiveri añade, además, que la semana pasada, el Ministerio de Agricultura aprobó un Real Decreto de ordenación del sector porcino que incluye medidas para la reducción del amoníaco y gases de efecto invernadero de las explotaciones, como vaciar las fosas de dentro de las granjas por lo menos una vez al mes y elegir entre vaciarlas dos veces por semana o cubrir las balsas exteriores donde se acumulan los purines. “El objetivo no debe ser reducir cabañas sino emisiones, necesitamos ayudas y tiempo para hacerlo”, concluye.

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Fuente de información: El País

¿Tienen que pagar las grandes explotaciones ganaderas el canon del agua?

El gobierno catalán reclamará el gravamen por el uso del agua a las grandes explotaciones ganaderas, y prevé iniciar la implantación paulatina en las 886 granjas de mayor tamaño.

26 febrero 2020

¿Tienen que pagar los ganaderos el canon del agua? La pregunta es pertinente porque, al fin y al cabo, esta tasa ya la pagan (y desde hace años) los usuarios domésticos, los comercios o las industrias en Catalunya.

El Govern ha recogido en el proyecto de ley de medidas que acompañan a los presupuestos la implantación progresiva del canon del agua en las granjas (cerdos, vacas…). El plan, que ha tropezado con el rechazo del sector agroganadero, persigue instaurar esta tasa este mismo año empezando por las grandes explotaciones; concretamente, por las 886 de mayor tamaño (sujetas al sistema de autorización).

La Agència de Catalana de l’Aigua (ACA) prevé recaudar unos 425.000 euros en el 2022, si bien a partir de esa fecha pagarían todas las explotaciones ganaderas y entonces la recaudación superará los 2 millones de euros anuales.

Nuevo intento, aplicación progresiva

La Generalitat había intentado en los últimos años aplicar el canon del agua al sector ganadero; pero no tuvo éxito, al no aprobarse los presupuestos. Ahora, lo intenta de nuevo.

Su plan consiste en introducir el impuesto paulatinamente, en tres años, y de manera parcial. Es decir, no se aplicaría a la integridad del canon, sino solo a uno de sus dos componentes; concretamente, al gravamen por el uso del agua, pero no al gravamen de la carga contaminante por vertidos. “Solo planteamos que los ganaderos paguen uno de los dos componentes de la tasa”, señala Diego Moxó, director de coordinación territorial del ACA. Sería, además, una aplicación suave; los coeficientes irían aumentando hasta el 0,5 en el 2022, de manera que ese año la bonificación sería del 50%.

No pagan por carga contaminante

La Agència de l’Aigua, sin embargo, no se plantea que los granjeros paguen el gravamen por la carga contaminante, y argumenta en este punto que el sector ya está sujeto al decreto de gestión de purines del Departament d’Agricultura.Este decreto obliga a efectuar un correcto tratamiento de estos desechos; y exige a los dueños de estas instalaciones disponer de balsas de almacenamiento y de tierras agrícolas donde aplicarlos como fertilizantes. Pero ¿por qué los ganaderos no han pagado nunca el canon del agua? (una tasa cuyos ingresos son finalistas y sirve para pagar los sistemas de saneamiento y depuración de las aguas residuales).

Pero ¿por qué?

El argumento del ACA es que mientras los usuarios domésticos e industriales pagan un canon para financiar los sistemas públicos de saneamiento y de depuración, los ganaderos “casi no generan aguas residuales” y no llevan sus caudales a un sistema de saneamiento público; y, por lo tanto, “si lo hacen bien, no contaminan el medio”, arguye Moxó. Sin embargo, si en una inspección -o tras una denuncia- se demuestra que un granjero ha contaminado las aguas, se le obliga a pagar íntegramente el canon.

Rechazo de la industria ganadera

La industria agroganadera rechaza que se implante el canon de agua con el argumento de que sus explotaciones se abastecen de fuentes particulares y recursos propios. Aduce también a que han hecho grandes inversiones para mejorar la eficiencia en el consumo del agua.

“El nuevo decreto de gestión de la fertilización del suelo de los residuos ganaderos, de julio del 2019, es una de les normativas más exigentes en el ámbito mundial; mejorará la calidad de las aguas, pero supone un gran impacto económico”, dice un manifiesto firmado por un frente común de la industria agroganadera (Unió de Pagesos, JARC, Federació de Cooperatives Agràries de Catalunya, PORCAT, ANPROGAPOR, FAC, FECOC y ASOPROVAC). Diego Moxó replica a estos argumentos diciendo que quienes tienen fuentes propias (como los pozos que explotan las industrias) también pagan el canon del agua.

Vertidos continuos

Los vertidos de purines (muchas veces indiscriminados) han contaminado con nitratos las reservas subterráneas de agua en Catalunya hasta unos niveles que han convertido este asunto en uno de los problemas ambientales más grandes de Catalunya y frente al cual la Administración ha dado una respuesta prácticamente nula; al menos, en términos de eficacia. La Generalitat ha ido ampliando continuamente las zonas subterráneas contaminadas (llamadas eufemísticamente zonas vulnerables), y más de 400 municipios (el 45% de todos los municipios catalanes) superan los niveles máximos de nitratos permitidos (50 microg/litro), lo que impide usar el caudal de fuentes y manantiales. Estos residuos, y en concreto el exceso de contenido en nitratos, se relaciona con diversas enfermedades.

Zonas contaminadas

“La recuperación de las zonas contaminadas por nitratos es muy lenta; no se recuperan como las aguas superficiales que, una vez sometidas a tratamiento de depuración, se sanean muy rápidamente”, dice Moxó. Las sucesivas revisiones sobre el estado de estas aguas subterráneas ha comportado la ampliación de las zonas afectadas. No hay señales de mejora.

La situación ha adquirido tal gravedad en Catalunya, que el decreto sobre gestión de los purines (excrementos ganaderos), aprobado por el Govern hace seis meses, impide durante dos años que se implanten nuevos establecimiento ganaderos en los municipios más afectados. En breve, el Govern prepara una nueva revisión que ampliará las zonas vulnerables.

“La industria porcina es una de las principales responsables de la contaminación del suelo, dado el uso desmesurado de purines como fertilizante agrícola”, señala un manifesto firmado por una decena de entidades (Greenpeace, Ecologistas en Acción, Grup de Defensa del Ter, Adda o la Fundación Franz Weber, entre otras).

Situación en Osona

En la comarca de Osona i Lluçanés, el porcentaje de fuentes que superan el límite de potabilidad (50 mg/l de nitrato) se incrementó en el año 2018 desde un 41% al 50% (con relación al año 2’017), según los datos del Grup de Defensa del Ter.Los estudios de esta oenegé (año 2018) indicaron que de las 155 fuentes analizadas, 30 no manaban. Y respecto a la media de la concentración de nitratos los resultados indicaron un aumento del 57 al 64 mg/l de nitratatos.

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Fuente de información: La Vanguardia